domingo, 31 de mayo de 2009

El mileurismo

Hoy he leído un interesante artículo en El País, sobre lo que en España se ha denominado el mileurismo, refiriéndose "al joven licenciado, con idiomas, posgrados, másteres y cursillos que no gana más de mil euros". Pues bien, la crisis económica que se está ampliando y generalizando en varios lugares del mundo, nos ha llevado a una idea aún más problemática, aquella en la que el mileurista ya no es ese joven licenciado, sino que más bien es aquel que "ha dejado de tener edad, gana mil euros, no ahorra, vive al día de trabajos esporádicos o de subsidios y, pese a todo, no se rebela".

Creo que las dimensiones de esta crisis financiera no las hemos visto con mucha claridad. Ojalá este artículo les dé pistas. 

"Adiós, clase media, adiós". 

2 comentarios:

Leonardo Espitia dijo...

Después de esta lectura ando con temblor en las piernas! Aunque la verdad es que pueden como no pueden ser todos estos pronósticos... yo quiero inclinarme porque nos espera algo mejor.

Unknown dijo...

Todo depende de la necesidad de seguridad que tenga el individuo, o más bien la necesidad de la sensación de seguridad, tengo la idea de que el sistema en que tenemos que tener mil títulos y con ello asegurar un futuro es una idea moderna y que está mandada a recoger, debemos pensar en menos títulos oficiales y pensar en ser más dinámicos con el conocimiento, también debemos partir de la base de que la función principal de adquirir conocimiento, no es conseguir dinero, aunque también esa ecuación vale, así que debemos aprovechar todos los recursos que nos brinda la sociedad actual, que en materia de conocimiento, es mucho más abundante que las posibilidades que tuvieron nuestros padres, pero adicionalmente, eso hace que los "dueños de la verdad" sean cada vez menos y que si queremos tener un estatus económico tenemos que ser creativos y no esperar a que alguien más lo sea por nosotros.
Me parece importante decir que las cosas como se están dando hubieran sido igual con o sin recesión económica, aunque esta si aceleró esta situación. Hay formas de evitar estar en el abismo económico todo el tiempo, lo que toca cambiar es el esquema de pensamiento, que en muchas ocasiones es aún “chapado a la antigua”.